Capítulo 9 • Filia
🐶 Cerbero • 19/11/2002

1 2  • 3  • 4  • 5  • 6  • 7  • 8  • 9  • 1011  • 12 13


Llevo ya varios años cuidando de ella, una criatura sin nombre, sin pasado. ¿Cómo alguien pudo abandonar a una niña ciega en un lugar tan inhóspito como este? Es un misterio que me atormenta cada noche, mientras observo la ciudad dormida. Placebo, desde el tocadiscos, me susurra "Every You Every Me".

Para ella, soy un guardián invisible, una presencia que la protege de los horrores que acechan en la oscuridad. Al principio, me percibía como una voz en su cabeza, un eco irreal en su mundo de tinieblas. Pero con el tiempo, ha aprendido a confiar en mí. Le proporciono alimento, cobijo y conocimiento, convirtiendo nuestra morada sombría en un refugio contra el frío y la desesperación.

Nadie ha venido a buscarla, y así ha pasado a formar parte de mi vida. Es increíble la alegría que ha traído a esta casa, iluminándola con su inocencia y su valentía. Cada día es un regalo que me llena de gratitud y asombro.

Ahora, cuando debo tomar la vida de otros, lo hago para protegerla, para mantenerla a salvo de los peligros que acechan en las sombras. Es una forma de matar más excusable, aunque mi corazón no deje de sentir el peso de cada vida segada. Pero cada vez que nuestros lazos se entrelazan, siento un destello de paz en mi alma atormentada.

He llegado a comprender más claramente que mis tentáculos, que una vez fueron instrumentos de muerte descontrolada, reaccionan de manera selectiva ante las conexiones humanas. Cuando la gente me ve, los extremos de sus lazos se desenganchan de las personas con las que se relacionan y son atraídos hacia mí, mientras que mis lazos, en una respuesta defensiva, interpretan este cambio como una traición que alimenta mi impulso asesino.

Sin embargo, al encontrar a la niña, descubrí que sus lazos no estaban vinculados a nadie más. Ella es pura en su relación emocional, sin traiciones ni desvíos, y además, su incapacidad para verme directamente actúa como un escudo adicional. Por lo tanto, mis tentáculos no reaccionan ante ella, no sienten esa compulsión por la violencia. Con el tiempo, he aprendido a confiar en la solidez de su conexión conmigo. Su inocencia y su ceguera la protegen de mi maldición. Es un recordatorio constante de que no todos los lazos están manchados por la traición y que la pureza emocional puede ser un escudo contra la oscuridad que habita en mi ser.

Y he aprendido tanto de ella... Nuestra casa se ha convertido en un verdadero hogar, un lugar donde cada rincón está diseñado para su seguridad y comodidad. Las esquinas redondeadas y el suelo igualado son solo el comienzo de mi empeño por garantizar su bienestar. Incluso estoy trayendo discos nuevos, nuestra música no es la más apropiada para su edad.

Ella recuerda poco de su pasado, solo retazos de crueldad y desdén. Las piedras en su camino y las risas burlonas aún resuenan en sus recuerdos, pero no hay lugar para la amargura en su corazón valiente. Sé que soy lo mejor que le ha pasado, aunque la modestia me impida admitirlo por completo.

A veces, me pregunto si mi inmortalidad será suficiente para protegerla siempre, si podré seguir velando por su seguridad cuando los siglos pasen y el mundo cambie a nuestro alrededor. Pero por ahora, sólo puedo aferrarme a la esperanza de que mi afán cuidador sea suficiente para guiarla a través de las sombras hacia un futuro más luminoso.

En nuestra casa, donde la oscuridad hace constante compañía, a menudo me encuentro perdido en pensamientos sobre el pasado. ¿Cómo llegamos hasta aquí? ¿Qué fuerzas nos llevaron por este camino tortuoso?

Mientras observo a la criatura ciega, su inocencia y valentía me recuerdan a ti, aunque no puedo evitar sentir una punzada de dolor al hacerlo. ¿Acaso estoy destinado a repetir los mismos errores del pasado? La sombra de un recuerdo, tan antiguo como el tiempo mismo, parece acecharme en cada esquina, recordándome la oscuridad que una vez habitó en mi corazón.

A medida que me sumerjo en estas reflexiones, una voz susurra en lo más profundo de mi ser, como un eco lejano que busca ser escuchado. Es la voz de alguien que alguna vez conocí, una presencia que creía haber dejado atrás pero que parece persistir en la penumbra de mi existencia.

¿Es posible que aún estés conmigo, incluso después de todo este tiempo? ¿O es solo la culpa y el remordimiento jugando con mi mente atormentada? Sea como sea, tu presencia se hace sentir en los momentos más oscuros, recordándome que no puedo escapar de mi pasado ni de las decisiones que me llevaron hasta aquí.


1 2  • 3  • 4  • 5  • 6  • 7  • 8  • 9  • 1011  • 12 • 13

ESTE SITIO FUE CONSTRUIDO USANDO