Capítulo 13 • Expiación
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Despierto sobresaltado al sentir el cambio brusco de la canción en el tocadiscos, esta vez suena "Bloodlines" de Dethklok.
Noto cómo un susurro oscuro se eleva desde lo más profundo de mis entrañas abriéndose paso hacia mi boca. El dolor casi es insoportable, como si me partiera en dos. Intento tomar aire y toso con fuerza, intentando aplacar el golpe. Pero algo escala por mi cuello deseando salir. Entre estertores y arcadas emergen de mis entrañas lazos como cuchillas en espirales rojas y azules que me arañan la garganta, mis gemidos resuenan con los recuerdos de los pecados que creía haber dejado atrás. Mis lazos, una vez puros y brillantes, ahora se ven contaminados por la sombra del pasado, una sombra que nunca pude sacudir por completo.
Lucho por mantenerme firme, pero mi cuerpo dolorido no responde. Una figura comienza a hacerse visible a partir de los lazos que he vomitado. Reconozco el contorno que se forma en la oscuridad y un escalofrío recorre mi espalda al darme cuenta de que eres tú: la misma a la que arrebaté la vida en un acto de locura y desesperación. Te habías escondido en mi interior, alimentándote de mi culpa y remordimiento. Después de todo, conseguí resucitarte. Estabas esperando el momento perfecto para que la traición fuera una verdad innegable y la venganza una solución absoluta.
Tu presencia se hace cada vez más tangible mientras mi propia materialización humana se desvanece lentamente. Soy testigo impotente de cómo desatas tu ira. Desencadenas una ráfaga de lazos morados hacia mi amor. La despiertas, zarandeas y atacas con tus filos cortantes mientras la envuelves. Veo cómo su cuerpo se retuerce y contorsiona bajo la presión que ejercen tus ataduras. Escucho horrorizado sus gritos de agonía, buscando desesperadamente una salida que ya no existe. Sus brazos quebrados intentan asir la protección de mi cuerpo ya intangible en un intento desesperado de encontrar consuelo en medio del caos que la rodea.
Te imploro con cada fibra de mi ser, suplico con la desesperación más profunda que mi voz pueda expresar, pero mis palabras caen en el vacío ante la implacable furia de tu venganza. Intento aferrarme desesperadamente a los últimos vestigios de mi humanidad, luchando contra la marea con la que me arrastras hacia la perdición definitiva. Mis esfuerzos son en vano. Mis manos se aferran a la nada mientras mis impotentes retinas quedan abrasadas por la visión de mi amor, mi todo, que se desintegra en mil pedazos que me atraviesan en un estallido ensordecedor. Mientras clavo mis pupilas de odio en tu figura, escucho tu risa cubriendo el olor a hierro húmedo de la habitación y tu imagen se disipa en una neblina de sombras y susurros, dejando tras de sí solo el eco eterno de un lamento ahogado por el peso de mi culpa. El sufrimiento me consume, me arrastra hacia abismos de desesperación, mientras la cruel realidad de mi pérdida se hunde en lo más profundo de mi ser sin poder derramar una lágrima, recordándome que he perdido para siempre a la única persona que me hizo sentir verdaderamente humano.
Me sumerjo en la más absoluta oscuridad, un abismo sin fin que devora toda esperanza y consuelo. Hace unos instantes, me hallaba acompañado por la presencia reconfortante de la vida y, en un parpadeo, por la sombra implacable de mi propio destino. Soy un condenado a vagar por la eternidad, un espectro desgarrado por los errores de mi pasado y por la implacable venganza de aquella a quien una vez juré amar y proteger. La culpa se apodera de cada fibra de mi ser, carcomiendo mi alma mientras observo los despojos de lo que alguna vez fue mi más profundo amor, ahora reducido a sangre y vísceras por mis propias manos manchadas de pecado. Sé con certeza que nunca podré redimirme, que mi destino está sellado en la eterna penitencia de mis errores. Y en este abismo de remordimiento, comprendo que no estaré solo; tú, convertida en la encarnación misma de mi culpa, serás mi compañera en esta eterna condena, alimentándote remordimientos, perpetuando así mi tortuoso destino.
Before the story begins Is it such a sin For me to take what's mine Until the end of time? We were more than friends Before the story ends And I will take what's mine Create what God would never design...
